El sector de la construcción ha sido históricamente uno de los motores clave de la economía española. Sin embargo, desde la crisis financiera de 2008, la profesión no ha logrado atraer suficientes nuevos profesionales, lo que ha generado un déficit generacional que amenaza con impactar gravemente en la capacidad del sector para responder a las demandas actuales y futuras. Según el último informe del Observatorio de la Construcción publicado en junio de 2024, la población joven representa solo el 9% de los trabajadores del sector.
En los últimos años, muchos estudiantes han optado por otras especialidades emergentes, como la ingeniería informática, la inteligencia artificial y la energía verde, dejando a la construcción en una situación delicada. Este cambio en las preferencias ha aumentado la presión sobre las empresas constructoras, que ahora deben competir no solo por trabajadores jóvenes, sino también por aquellos con competencias en tecnologías avanzadas y sostenibilidad.
"La construcción es un sector vital para el desarrollo económico y social de España, pero sin un relevo generacional adecuado, corremos el riesgo de perder competitividad a nivel global. En Catenon, creemos que la clave está en modernizar la percepción del sector, destacando su capacidad para ofrecer carreras estables, bien remuneradas y con un fuerte componente de innovación tecnológica y responsabilidad ambiental." comenta Carmen Caro, Directora de Infraestructuras y construcción de Catenon.
“Ante esta situación, -señala Carmen Caro- empresas y universidades han intensificado sus esfuerzos para cambiar la percepción de los jóvenes sobre la profesión. A través de programas de colaboración, se está haciendo visible la gran demanda de profesionales, tanto a nivel nacional como internacional. Las empresas españolas, muchas de ellas líderes en proyectos globales y con presencia en todos los continentes, están ofreciendo grandes perspectivas de desarrollo profesional en carreras internacionales en las que ser partícipe de grandes obras de infraestructuras, asi como en áreas como la industrialización de los procesos constructivos, la sostenibilidad y el uso de tecnologías innovadoras".
Atracción y retención de talento
La atracción de talento joven es una de las grandes preocupaciones de las empresas del sector, especialmente ante la realidad de unas plantillas envejecidas. Con una edad media que ronda los 50 años, el envejecimiento es un reto urgente. Para revertir esta tendencia, se está promoviendo una visión más moderna de la construcción, integrando conceptos como la digitalización, el uso de drones para inspecciones y trabajos a distancia, la modelización BIM (Building Information Modeling) para la planificación eficiente de proyectos, y soluciones sostenibles que impactan de manera positiva en el medio ambiente
Por otro lado, la industrialización de los procesos constructivos también está transformando el sector, haciendo que la construcción sea una opción más atractiva para aquellos jóvenes que buscan trabajar en un entorno dinámico, tecnológico y con una clara misión de contribuir al bienestar social. En este sentido, el sector tiene la capacidad de ofrecer oportunidades estables y bien remuneradas, en un campo que además está en plena transformación hacia la sostenibilidad.
Es imprescindible que el sector de la construcción siga invirtiendo en iniciativas que fomenten tanto la atracción como la retención del talento joven. La colaboración entre empresas y universidades, y la promoción de una visión moderna del sector, son elementos clave para asegurar el relevo generacional y garantizar la capacidad de la construcción para seguir siendo un motor fundamental de la economía española.
"El sector de la construcción ofrece no solo estabilidad laboral, sino también una plataforma única para la innovación y la transformación. Es momento de que los jóvenes vean en la construcción una carrera con impacto, donde pueden mejorar la calidad de vida de las personas y las ciudades," concluyó Carmen Caro.