La presidenta de UPN, Cristina Ibarrola, ha lanzado fuertes críticas contra la presidenta del gobierno de Navarra, María Chivite, acusándola de estar rodeada de presunta corrupción y de dañar la reputación de la Comunidad. Ibarrola ha reaccionado al mensaje de fin de año de Chivite, quien aseguró que la reputación de Navarra no será manchada por quienes se aprovechan de ella, y prometió ser implacable con quienes vulneran la ley y la ética pública.
Ibarrola ha cuestionado la credibilidad de Chivite al afirmar que si realmente fuera implacable, debería haber dimitido por su responsabilidad en el caso de Santos Cerdán y el escándalo de la adjudicación de Belate. Según Ibarrola, Chivite no puede justificar cómo su gobierno adjudicó 76 millones de euros a la UTE presuntamente copropiedad de Cerdán, lo cual, según ella, ha mermado su credibilidad para hablar de transparencia y ética pública.
La líder de los foralistas ha criticado la gestión de Chivite en áreas clave como la sanidad y la vivienda, señalando que estas áreas han empeorado durante su mandato. Ibarrola ha recordado que, aunque este año Chivite ha mencionado estos problemas, no ha presentado soluciones concretas. Según Ibarrola, con Chivite en el gobierno, el acceso a la vivienda y las listas de espera en salud han alcanzado niveles críticos, afectando a muchos navarros.
La situación de los jóvenes en Navarra, otro punto de crítica
Ibarrola también ha expresado su preocupación por el mensaje de Chivite dirigido a los jóvenes, acusándola de ser autocrítica solo de palabra y de no ofrecer soluciones reales. Según Ibarrola, la desesperanza entre los jóvenes ha sido generada por la gestión actual, ya que muchos no ven posibilidades de independizarse, incluso trabajando. La presidenta de UPN considera que el ciclo de Chivite está agotado y que Navarra necesita un cambio de liderazgo.
Ibarrola ha concluido su crítica señalando que el mensaje de fin de año de Chivite es una prueba evidente de que su gobierno está superado por la presunta corrupción y es incapaz de abordar los retos que enfrenta Navarra. Según la presidenta de UPN, la región no puede seguir bajo la gestión de Chivite ni un minuto más, ya que no ha aportado soluciones a los problemas más acuciantes de los navarros.
La situación política en Navarra continúa siendo tensa, con acusaciones cruzadas entre los líderes de los principales partidos. La gestión de Chivite y las acusaciones de corrupción han generado un debate intenso sobre el futuro de la región y la necesidad de cambios en su liderazgo. La presidenta de UPN, Cristina Ibarrola, ha dejado claro su descontento con la gestión actual y su deseo de un cambio en la dirección política de Navarra.
