El conflicto en Ucrania ha dado un nuevo giro con la confirmación de que Corea del Norte ha comenzado a enviar tropas para apoyar a Rusia. Así lo ha anunciado este viernes el Servicio Nacional de Inteligencia de Corea del Sur (NIS), generando una fuerte alarma en la comunidad internacional.
La inteligencia surcoreana estima que alrededor de 1.500 soldados norcoreanos ya habrían llegado a territorio ruso, aunque fuentes anónimas sugieren que la cifra final podría ser mucho mayor, acercándose a los 12.000 efectivos. Esta información coincide con las declaraciones del presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, quien días atrás había alertado sobre el posible despliegue de 10.000 soldados norcoreanos en el frente de batalla.
La decisión de Pyongyang de involucrarse directamente en el conflicto ucraniano representa un significativo escalamiento de la tensión geopolítica y consolida aún más la alianza entre los regímenes de Kim Jong-un y Vladimir Putin. De hecho, ambos líderes han intensificado sus lazos en los últimos meses, con intercambios de felicitaciones y la firma de un pacto militar que compromete a ambas naciones a ayudarse mutuamente en caso de agresión.
Un nuevo nivel de desesperación rusa
El portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller, ha calificado esta movida como un "nuevo nivel de desesperación" por parte de Rusia, que ha sufrido importantes pérdidas en el campo de batalla. Además, se han encontrado cada vez más pruebas que vinculan a Corea del Norte con el suministro de municiones a su aliado ruso.
La inteligencia surcoreana ha presentado fotografías aéreas que muestran la concentración de tropas norcoreanas en las ciudades rusas de Ussuriysk y Khabarovsk. Asimismo, se han obtenido imágenes del puerto de Chongjin, en Corea del Norte, donde un barco ruso habría transportado a los soldados norcoreanos hacia territorio ruso.
Respuesta internacional
Ante esta grave amenaza, el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, ha convocado una reunión de emergencia con altos funcionarios de seguridad para analizar la situación y coordinar una respuesta conjunta con la comunidad internacional. Seúl ha hecho un llamado a la unidad para enfrentar esta nueva escalada del conflicto en Ucrania.
La participación de Corea del Norte en la guerra en Ucrania representa un desafío sin precedentes para la seguridad global y podría tener implicaciones de largo alcance para la estabilidad en la región de Asia-Pacífico.
