La comisión de contratación de Euskal Trenbide Sarea, ente público dependiente del departamento de Movilidad Sostenible del Gobierno Vasco, ha adjudicado hoy la supresión del paso a nivel entre andenes de la estación de Bedia, de la línea del ferrocarril Bilbao-Donostia, y la construcción de un aparcamiento disuasorio. La UTE adjudicataria dispone de un presupuesto de 2,9 millones de euros y un plazo máximo de ejecución de 12 meses.
El aparcamiento, con una superficie de 2.150 metros cuadrados, está proyectado a la misma cota de los andenes existentes con el fin de mejorar la accesibilidad a la estación. El parking dispondrá de un total de 41 plazas, con cuatro plazas preparadas con carga para vehículos eléctricos y dos para personas con movilidad reducida. Asimismo, habrá un espacio habilitado para el estacionamiento de bicicletas, tanto convencionales como eléctricas.
El objetivo del aparcamiento disuasorio, que ocupará una parcela adyacente a la estación, ubicada lejos del casco urbano, es atraer más personas usuarias al ferrocarril de los municipios limítrofes como Usansolo y Lemoa.
El pliego incluye la construcción de un edificio de viajeros de planta única, con un tejado a dos aguas y algo más de 110 metros cuadrados de superficie. El inmueble contará con tres estancias, un vestíbulo principal y a cada lado de este, un cuarto de 9 metros cuadrados, uno destinado a estancia del jefe de estación y el otro dedicado a las instalaciones de la terminal, que albergará el cuadro de baja tensión, el armario de comunicaciones y otros equipos del telemando. En el vestíbulo se colocarán las máquinas expendedoras y validadoras de billetes.
La supresión del paso a nivel entre andenes, por su parte, se resolverá con una pasarela peatonal que cruza sobre las vías del ferrocarril para acceder al andén sur, en dirección a Bilbao. El tablero de la estructura está situado a una cota de aproximadamente 5 metros desde la rasante del andén.
La pasarela está proyectada en acero en gran parte. Las torres de los ascensores están diseñadas con una estructura de perfiles metálicos laminados. Las fachadas donde se sitúan los embarques de los elevadores son acristaladas, y las otras dos, opacas. Al ascensor del andén norte, en dirección a Donostia, se accede directamente desde el interior del vestíbulo.
Las escaleras se sustentan sobre dos pequeñas mesetas de hormigón desde las que salen dos barras de acero. La estructura portante está ejecutada mediante perfiles tubulares rectangulares y chapa grecada, sobre la que se dispondrá un pavimento de baldosas con acabado gres. A lo largo de toda la pasarela se pondrá barandilla con postes metálicos con pasamanos a doble altura e iluminación integrada en el interior.